martes, 8 de marzo de 2011

Líneas


Una mañana me dio por observar con detenimiento las líneas de mis manos.
Más que líneas, eran ramas de un pequeño árbol junto a mi muñeca.

Las que rodeaban mi delgado monte de Venus prometían longevidad en alguna de mis vidas.
Las que guiaban mis emociones, se alzaban vigorosas hacia el dedo índice reafirmando mi sensibilidad.
Aquéllas que surcaban el pequeño tronco del árbol de un extremo a otro, las que muestran el camino de la cabeza, se diluían curiosamente en miles de recovecos.

Y aquellas que guíaban mi destino, los surcos longitudinales que misteriosamente dividen la mano, parecían luchar por seguir un rumbo fijo... Pero su final se dividía claramente en dos.

No era de extrañar...

miércoles, 2 de marzo de 2011

Y yo?

Y yo bebiendo cerveza a morro de la botella de litro...